Y ya nos hemos plantado en el este nuevo año 2014, y mira tú por donde, primer martes de mes.
El 7 siempre ha tenido su magia, y ya la tenía mucho antes de que el amigo Manué se sacara de la chistera su #7Verde, por eso nos parece mucho más que una casualidad que volvamos a bloguear de la mano de nuestra querida Rut Roncal.
El pasado 3 de diciembre lanzábamos el órdago de dejar en vuestras manos, queridos lectores, la continuidad de nuestras colaboraciones mensuales, y mira tú por donde, que aunque juntando los comentarios dejados en SobreviviRRHHé! y en La Verdad Absoluta No Existe, no llegamos a esos diez comentarios que nos habíamos puesto como necesarios para continuar, sí que es verdad que en facebook y en twitter (e incluso en persona) sois muchos los que nos habéis pedido continuar.
Así que aquí estamos, primer martes de mes, primera entrada seria del año, un día 7 (verde, azul o como tú lo quieras pintar) y ésta es nuestra declaración de intenciones para el año nuevo. Año en que un servidor, por allá por el mes de agosto, pasará a ser un cuarentón (a mí querida Rut ni le pregunto, no hay más que ver que es una jovenzuela, mucho más que yo) y por eso cuando me pasó esta foto (entre otras diecitantas para elegir) algo hizo click en mi cabecita.
«Nunca serás demasiado viejo como para fijarte un nuevo reto o soñar un nuevo sueño.”
Yo lo he pillado al vuelo y no pienso renunciar a mi cuota de retos este 2014, y mucho menos a mi porción de sueños para este año que empieza. Y si cuando llegue diciembre el reto no ha llegado a buen puerto, o el sueño no era más que una simple pesadilla, da igual… lo importante habrá sido lo que hemos aprendido por el camino, ¿verdad Rut?
Ay! mi querido Iñaki!!! Cuan ciertas son tus palabras y qué importante es que nos marquemos nuevos retos a partir de nuestros sueños.
Yo creo que es muy importante tener sueños y darles vida, porque de ellos se nutren nuestras ilusiones… o lo que es lo mismo… Shakespeare decía:
“Un hombre que no se alimenta de sus sueños, envejece pronto”.
Así que si no queremos sentirnos viejos antes de tiempo… (que sepas mi querido Iñaki que yo este año me acercaré a la cuarentena con un maravilloso 39…) y yo he de decir que joven me siento un rato largo… alimentamos nuestros sueños y ayudemos a nuestro entorno que haga lo mismo.
En esta época es típico comenzar el año con ideas de hacer cosas, con proyectos en aparencia ilusionantes que comienzan con una idea, una conversación o una uva con un jugo especial en la noche de Año Nuevo. La cuestión es ¿cómo puedo hacer que esos sueños no se queden en el aire y se conviertan en realidad?
Lo primero de todo, he de preguntarme a mi mism@ cuánto de 0 a 10 me siento de motivado para lograr ese sueño. Ya lo he dicho alguna vez en el blog que es muy importante trasladarlo a un número pues así somos capaces de cuantificar nuestra intención. Si ese número es inferior a 8 he de preguntarme ¿por qué? y ¿qué necesitaría para alcanzar una cifra superior a 8?
Cuando elija un sueño y haya encontrado la motivación para seguir adelante… los 4 pasos mágicos que nos harán llegar a nuestra meta son los siguientes (reconozco que me he inspirado en los diseños de @mrswonderful … es que son tan monos… el contenido es mío así que espero que me perdonen por la imitación, jijiji…)
Una vez acabeis el 4º paso… nos ponemos en marcha.
Lo decía Lao – Tsè:
Un viaje de mil millas comienza con el primer paso
Así que … soñemos, como nos pedían Aerosmith… ya hace unas cuantas décadas:
DREAM ON
Nos encantaría saber tu opinión sobre esta entrada: