El misterioso mundo de las estadísticas de los blogs.

Eso de que escribimos en blogs por nuestra satisfacción personal como que sí pero no.

Eso de que no me importa cuánta gente me lea porque lo hago por mí y lo seguiré haciendo mientras tenga algo que contar, pues ni sí ni no sino todo lo contrario.

Pongamos un caso, un suponer como diría aquel: usuario de Blogger, radiante y feliz con su elevado número de visitas diarias, un día decide pasarse a WordPress y ve cómo sus estadísticas caen en picado, es más, en su primer mes de andadura tras el cambio de plataformas descubre ojiplático cómo ha recibido más visitas en Blogger sin publicar nada que en WordPress publicando 20 posts con mayor o menos éxito en cada uno de ellos.

Otros indicadores, como links en bitly o actividad en dlvr.it o en las páginas de facebook se han mantenido, incluso han crecido ligeramente, pero eso de las estadísticas de visitas al blog como que no terminan de cuadrar.

Recientemente lanzaba esta reflexión al aire en twitter, a lo que obtuve la siguiente respuesta:

https://twitter.com/MapacheFeliz/status/298912323798712320

Pues nada, tendremos que ganarnos esa posición en Google, no crees?

Habrá que sacar el SEO que todos llevamos dentro y empezar a perjeñar estrategias para que Google nos quiera tanto como nos quería antes.

O podemos lanzarnos al lado más falsarius y recurrir a maquillajes e ilusiones… lo que algunos diseñadores y entendidos en lenguajes informáticos llaman “tocar los bastidores”. ¿Y eso que és?… pues simplemente mentir. Manipular los datos que muestran ciertos widgets (contador de visitas, de seguidores, suscriptores etc) y aparentar un impacto que no se corresponde con el que nos muestran las analíticas.

Si bien entendemos que es interesante conocer el alcance de lo que escribimos porque vivimos de la ilusión de que se nos escuche, lo que no entendemos es esa actitud de “y yo más” que creemos no lleva a ninguna a parte. Por lo menos dentro de nuestro ámbito.

Otra cosa es que vendas un producto y tus ventas dependan del marketing 2.0… pero este no es nuestro caso, no?

Pensamos que cuando se alcanza un grado de madurez óptimo, se da un paso cualitativo y en lugar de mirar el cuánto (cuántos nos leen), miramos a quiénes (quiénes nos leen). Reflexionemos un poco; tal vez sea más interesante tener 100 seguidores que realmente aprecien nuestro blog y le den valor añadido con comentarios de calidad, a tener 1000 que tan solo hacen clic y se van.

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NOTA: este post nace de la unión de varias casualidades, de un tweet que lleva a otro tweet, de un DM que acaba en email, y para colmo de las casualidades, quería publicarlo hoy, 1 de marzo, cuando se cumplen dos meses de nuestra aventura en wordpress.

Precisamente hoy, 1 de marzo, Azucena Santillán, autora de la web Enfermería Basada en la Evidencia, y co-autora de esta entrada, cumple años. Felicidades Azucena, y gracias por compartir con nosotros estas reflexiones en voz alta. A ver si 2013 es el año de nuestra desvirtualización, que te estás haciendo mucho de rogar.