El Blog de Iñaki González

Aunque se imponen los modelos híbridos, muchos profesionales remotos no tienen aún acceso a las mismas herramientas de productividad que sus compañeros en la oficina, y esta es una de las causas de pérdida de talento en muchas empresas hoy en día.

Madrid, 10 de octubre de 2022– Superada ya la adaptación a la nueva normalidad, cientos de miles de empresas de todo el mundo han decidido mantener el modelo presencial previo a la pandemia, pero otros cientos de miles de organizaciones han dado un paso al frente adoptando modelos completamente remotos o híbridos. Esta situación coloca en distintas posiciones de acceso a herramientas de productividad a los trabajadores, una tarea que deben resolver los equipos de RRHH y de tecnología de forma colaborativa.

“Todos hemos vivido reuniones en las que había fallos de conexión, ralentizaciones en la comunicación o incluso en las que faltaban compañeros precisamente porque la calidad de la red no era la idónea”, afirma José Ramón Travé, director comercial de Unisys en España. “Es imprescindible que todos los profesionales tengan acceso a tecnologías, herramientas y soporte de máxima calidad sin importar su lugar físico de trabajo para que todos tengan las mismas oportunidades de desarrollar sus tareas de forma eficiente y productiva”.

Desde Unisys se han recopilado las cuatro reglas básicas para conseguir la paridad en el puesto de trabajo, sin importar si los trabajadores se encuentran en la sede corporativa, en una filial, en casa o en un lugar compartido.

1. Flexibilidad ante todo. La flexibilidad que otorga un modelo híbrido refuerza otras capacidades inherentes a cada profesional, lo que incrementa rápidamente la productividad. Pero, de la misma manera que los trabajadores apuestan por la flexibilidad, el departamento de tecnología debe ser capaz de adaptarse al máximo. Primero para entregar las herramientas necesarias al profesional pero luego, también y más importante aún, para dar el soporte adecuado, tanto online como personal si es necesario, a aquellos que trabajan de forma remota.
2. Reforzar la colaboración. El hecho de trabajar de forma aislada puede repercutir en la salud mental de algunos profesionales que, también, pueden perder oportunidades de colaboración con aquellos colegas de la oficina que se reúnen para tratar temas cotidianos o de negocio. Por ello, los equipos de RRHH y tecnología deben desplegar las herramientas indispensables para optimizar la comunicación y facilitar la colaboración entre compañeros. “A todos se nos vienen a la mente Zoom, Teams, cascos, micro, webcam… cuando hablamos de comunicarnos con compañeros que no están en la oficina, pero la colaboración es mucho más que eso: el vídeo y el audio deben ser de calidad, si no, no sirve de nada, por lo que los equipos de tecnología deben monitorizar las reuniones, desde que se inician hasta que concluyen, para comprobar que la experiencia ha sido satisfactoria para todos”, recuerda Travé.
3. El cambio está en la cultura empresarial. Un modelo de trabajo actual es absolutamente incompatible con los modelos previos a la pandemia. En los inicios del confinamiento, algunos estudios recordaban que los trabajadores estaban alargando hasta en un 40% sus jornadas laborales frente a las horas de trabajo en la oficina. Esto no implica necesariamente un aumento de productividad pero sí un incremento en el malestar, físico y mental, a largo plazo. Por eso, es fundamental que desde los equipos de RRHH se controle la estabilidad de los profesionales y se fomente la separación entre trabajo y vida privada especialmente para aquellos trabajadores que desempeñan sus tareas en casa. Desde RRHH también se deben cuidar aspectos que pueden resultar mundanos pero que expulsan a los trabajadores remotos de la cultura empresarial, como invitaciones a desayunos en días especiales, sin ir más lejos.
4. Pleno apoyo a los objetivos personales de cada trabajador. La flexibilidad que ofrece el trabajo híbrido refuerza la las fortalezas de cada profesional. “Hay compañeros que son mucho más productivos al amanecer y pueden avanzar en sus tareas a las 6 de la mañana, por ejemplo. ¿Por qué imponerles entonces un horario tradicional si sabemos que van a realizar sus tareas mejor a esa hora y, además, van a ser más felices el resto del día?”, se pregunta Travé.

Unisys se ha observado cómo algunos profesionales anteponen ya las opciones de trabajo flexible a otros asuntos como la libre disposición de vacaciones, los aumentos de sueldo o incluso los planes de carrera, por lo que ofrecer flexibilidad laboral con su correspondiente paridad digital puede ayudar a las empresas a retener y atraer talento en esta época de cambios constantes y de creciente incertidumbre.