Alivio. Eso es exactamente lo que le invadió. Como si se hubiera quitado un peso de encima. Tal vez debería sentirse culpable pero no era así. Imaginaba que él, por el contrario, habría sentido algo parecido a cuando te clavan una estaca en el corazón.

draco

Romper relaciones de amistad siempre resulta complicado, pero si ese amigo es un vampiro emocional, la complicación se convierte en una auténtica odisea. Y en ese viaje se produce un duro enfrentamiento entre el amor por la otra persona y la querencia por uno mismo. ¿Quién no tiene o ha tenido un amigo tóxico? Una de esas personas que te chupan la energía, te exprimen emocionalmente, te absorben por completo, reclaman toda tu atención y se sienten amenazados por el resto de tu círculo social. Quien más y quien menos todos conocemos a alguien así.

Los amigos van y vienen, la gente cambia, y no siempre es para mejor. Sentirse obligado a continuar con una relación que envenena, sólo por los lazos emocionales que te unen a esa persona, es un error. Tener una historia en común significa enriquecerse el uno del otro. Pero si lo que hace el individuo en cuestión es recocerte el cerebro, pero de enriquecerte nada de nada, está claro que algo no funciona.

La vida es demasiado corta y valiosa como para dejar que otra persona te la consuma.

¿Sabéis identificar a un vampiro emocional? En estos casos ni los ajos ni los crucifijos surten efecto. Quien lo haya vivido en carnes propias probablemente sepa cómo hacerlo. Para los que por suerte no los hayáis sufrido ahí van unas pistas:

  • Cada vez que quedáis con él sentís que volvéis a casa con la batería agotada.
  • Las conversaciones sólo giran en torno a sus problemas y únicamente os valora porque le escucháis y con vosotros se puede desahogar.
  • Sentís que necesitáis empezar a poner excusas para no verle porque sabéis que vuestros encuentros siempre acaban con algún drama.
  • No le preocupa vuestra vida pero sí el tiempo que pasáis con otras personas restándoselo a él.
  • Contacta con vosotros cuando las cosas le van mal pero las alegrías no las comparte.

Si cumple todas esas condiciones, no lo dudéis, estáis ante un ejemplar de “típicus vampíricus” de libro. Lo mejor es alejarse, si no puede ser de forma paulatina, de raíz. Explicarle las razones y poner distancia de por medio. Y si la diplomacia y la comunicación no funcionan porque el vampiro en cuestión no es amigo de discusiones ni dialécticas cuando el tema a tratar no le conviene, siempre queda la opción de la bala de plata en el corazón. ¿O era la estaca en el pecho? Siempre los confundo, me pasa igual con Maldonado y Montesdeoca.

Preocuparse de qué pensará alguien que no nos respeta no tiene demasiado sentido. Y ser egoísta a veces es positivo. Rodeémonos de buena gente, no nos sintamos obligados a mantener amigos tóxicos. Pero además recordemos que somos humanos. Seguro que todos, en algún momento de nuestra vida, hemos sido, también, un poquito venenosos. O un muchito.

Querido vampiro…

Vete de mí (Bebo y Cigala) Descanse en paz, maestro.

Firmado:

Rosa Muro Magaña
Periodista
Twitter: @pink_wall

Published by

7 respuestas a “Mi amigo es un vampiro.”

  1. Avatar de @alvawindows
    @alvawindows

    Varias frases ingeniosas, rosita, pero me has enamorado antes de leer la primera línea al ver la foto del Conde Drácula de Barrio Sésamo!!! Y el artículo, sin desperdicio…duro con la realidad q cuesta reconocer. Sigue así… Y que te deje @goroji seguir escribiendo!

    Me gusta

    1. Avatar de pink_wall
      pink_wall

      Muy fan de Draco, sí señor! Gracias Álvaro, me alegro mucho de que te haya gustado. Intentaré que @goroji se porte bien y me deje seguir dándole un poquito de guerra de vez en cuando. 😉

      Me gusta

    2. Avatar de @goroji

      Madre mía, esta Rosa es un portento, no sólo te escribe un post sino que te contesta a los comentarios, ole, ole y ole, jajaja…

      Descuida Álvaro, que yo le dejo escribir todas las veces que ella quiera, lo malo es que con tanto éxito terminará abriendo su propio blog y cuando sea famosa ya no querrá saber nada de nosotros, jajaja…

      Me gusta

  2. Avatar de carmengarciagomez
    carmengarciagomez

    esta clase de personas no tienen limites ,es yo y solo yo,no les importa las personas,egoistas a tope.

    Me gusta

    1. Avatar de pink_wall
      pink_wall

      Tienes razón Carmen. Es una pena que haya gente a las que el egoísmo le impide dar a los demás todas las cosas buenas que seguramente podrían ofrecer. Un saludo.

      Me gusta

    2. Avatar de @goroji

      Totalmente de acuerdo, Carmen, por eso cuánto más lejos tengamos a esas personas de nuestro entorno mejor que mejor.

      Me gusta

  3. Avatar de Porque no siempre una imagen vale más que 1000 palabras… – SobreviviRRHHé!

    […] Ni más ni menos que Rosa Muro (@pink_wall) a la que aquí conoceréis por sus colaboraciones en nuestros guest blogging con Mi fórmula para entender la vida y Mi amigo es un vampiro. […]

    Me gusta

Nos encantaría saber tu opinión sobre esta entrada: