Que hay jefes malos y jefes peores es algo que estoy tratando de dejar bien claro últimamente. También los hay buenos, los he tenido, y espero tenerlos en un futuro no muy lejano… pero cuando llegue el caso, ya hablaremos de ello.
Ahora nos toca lidiar con «los malos» y precisamente el otro día un buen amigo de la casa me enviaba este artículo que pretendía desgranar 10 lecciones básicas para lidiar con un mal jefe.
Y que quieres que te diga… que no me da la gana, que yo ya me he cansado de lidiar, ni soy muy taurino, ni tengo cintura de torero. Creo que es momento de que los malos jefes aprendan a lidiar con los buenos profesionales, y no a ponerles la zancadilla ni la pierna encima para que no levanten la cabeza. 😉
Algunas de esas lecciones y con las que menos estoy de acuerdo son las siguientes:
No hablar mal de jefe.
Dicen que no se demuestra mucha profesionalidad si hablas mal de tu jefe, pero será que el primero que se tiene que ganar la etiqueta de profesional tiene que ser él, no?
No mostrar desacuerdo públicamente.
Parece ser que no es bien visto llevar la contraria públicamente o contradecir al jefe y avergonzar delante de los demás, pero que quieres que te diga, que si te quedas callado estás siendo cómplice de sus tropelías, torpezas y desaguisados. Puede que decírselo luego en privado sea más correcto, pero o puede llegar tarde, o puede caer en saco roto.
Centrarse en la promoción de la carrera profesional.
Precisamente por eso, por nuestra carrera profesional, por nuestro prestigio como profesionales y por nuestra buena salud mental, yo ya me he cansado de lidiar con malos jefes. Quiero un buen jefe, eso que llamamos líder, que me ayude a promocionar y a crecer profesionalmente con retos interesantes, para mí, para el departamento y para la empresa.
Buscar otro trabajo.
No me da la gana. A mí me gusta mi trabajo, disfruto con lo que hago y creo que se podría hacer mucho más, por eso el que debería buscarse otro trabajo, si no lo está haciendo ya, debería ser el mal jefe, y no el buen profesional.
Por todo esto, y por otras muchas cosas más, que de momento me callo… NO ME DA LA GANA lidiar con alguien que no se lo merece!
El Blog de Iñaki González 
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